El azúcar refinado, o también conocido como azúcar de mesa, azúcar blanco es el hidrato de carbono más consumido en el día a día. ¿Pero cómo puede afectar esto en tu dieta deportiva?
Existe la afirmación de que nuestro cuerpo necesita una dosis diaria de este tipo de alimento para producir energía, sobre todo en las mañanas. En cierto modo esta afirmación no es del todo incorrecta, pero en realidad esta energía que se está produciendo en nuestro cuerpo sólo nos es útil en el caso de que realicemos ejercicio de alta intensidad en un periodo corto de tiempo.
Ante esta situación, la realidad del azúcar de mesa es que su ingesta diaria es totalmente innecesaria, y que en la actualidad se está produciendo un consumo mucho mayor que el gasto energético que se produce, incluso en las dietas deportivas. Como consecuencia a este exceso, al no ser gastada toda esta energía producida por el azúcar, este se convierte en una reserva energética inservible transformándose así en grasa localizada.
Esto no quiere decir que un deportista tenga que eliminar el azúcar de su vida, sino que su ingesta debe ser controlada en función de sus necesidades. Por ejemplo, no es lo mismo la energía que se necesita durante su periodo de entrenamiento que durante el de competición. Una forma de controlar esta ingesta es intercambiando los azúcares refinados por otros alimentos que nos aporten la energía necesaria de una forma mucho más saludable y que además componen una fuente de nutrientes importantes para nuestra salud.
Alternativas al azúcar refinado
Ante las alternativas al azúcar refinado nos podemos encontrar productos como la panela, la miel, los dátiles, el jarabe de agave o el jugo de zumo de frutas.
Panela
La panela compone uno de los sustitutos más directos y sencillos al azúcar refinado. Este producto se extrae de la caña de azúcar y es proporcionado directamente para el consumo, sin la necesidad de que pase por un proceso industrial.
Esta alternativa es de todas, la más sencilla de aplicar en la transición a una alimentación más saludable, ya que en su forma es prácticamente igual al conocido y extendido azúcar de mesa. Sin embargo, sigue siendo un alimento muy calórico y una ingesta incontrolada y abusiva puede provocarnos problemas de salud.
Miel
De todos los edulcorantes naturales que existen, la miel es uno de los más conocidos y extendidos entre nosotros. Este líquido viscoso está compuesto en su gran mayoría por fructosa y glucosa, y su sabor varía mucho en función del tipo de néctar que han utilizado las abejas para fabricarlo.
La aplicación de la miel en la cocina es muy versátil, siendo un componente perfecto para las ensaladas, salsa, postres e incluso carnes. Sin embargo no se debe perder de vista que su composición es a base de azúcares, por lo que el aporte energético que aporta la miel es muy elevado y en consecuencia su consumo debe ser moderado.
Dátiles
Los dátiles son cada vez más conocidos como un endulzante natural alternativo al azúcar de mesa. Este éxito del dátil proviene, en su gran mayoría, del movimiento real food. A partir de este momento se produjo un cambio muy interesante entre los ingredientes de muchos productos del mercado, iniciando una pequeña transición hacia la utilización de un azúcar mucho más saludable.
En muchas ocasiones lo podemos encontrar de forma elaborada, como por ejemplo, a través de las famosas cremas que se asemejan en su forma a la crema de cacao. Pero también se pueden encontrar de una forma mucho más manejable para el consumo diario como puede ser en forma de grano o en polvo.
Esta alternativa es muy saludable ya que eliminamos de nuestras dietas un elemento ultra procesado por algo mucho más natural, pero se debe tener en cuenta que es un producto muy calórico y poco económico.
Jarabe de agave
El jarabe de agave es uno de los endulzantes más conocidos de los últimos años, y no es de extrañar, ya que este jarabe 100% natural cuenta con aproximadamente un 70% de fructosa y un 25% de glucosa, dos componentes que hacen de este producto un sabor muy dulce y una opción de lo más natural y saludable.
Su forma es un líquido bastante viscoso que se asemeja a la miel de las abejas, y al igual que la miel su aplicación en los diferentes alimentos para endulzarlos es muy semejante, por lo que podemos aplicarlo a carnes, ensaladas o yogures entre muchos otros.
Por otro lado se debe tener en cuenta que al tener un alto porcentaje de azúcares también es un producto muy calórico por lo que su ingesta debe ser controlada y de forma no abusiva.
Jugo de zumo de frutas
Las frutas tienen un alto contenido de azúcares naturales como la fructosa, glucosa y sacarosa, elementos que convierten al jugo de frutas en una de las mejores alternativas a los azúcares refinados. Obviamente debido a su forma el uso de estos azúcares está muy condicionado, ya que por ejemplo, no es una buena opción para endulzar un café, pero sí es una excelente alternativa a la hora de cocinar y endulzar otro tipo de alimentos.
El consumo con moderación es la clave
Todos estos productos son una alternativa mucho más sana al azúcar de mesa, pero esto no quiere decir que su ingesta puede ser incontrolada. No se debe perder de vista que todos estos alimentos contienen unos altos niveles de azúcar por lo que también constituyen altos niveles de energía y al igual que se mencionaba al inicio, si no consumimos toda esta energía, se transformará en una reserva energética en forma de grasa localizada.
En la Clínica RC Celta contamos con un equipo de nutricionistas especializados que pueden ayudarte a realizar esta transición hacia los azúcares naturales acordes a tus necesidades deportivas. Pide cita y visítanos en nuestras instalaciones en A Sede del RC Celta en Rúa do Príncipe en Vigo.