El infarto de miocardio es una de las principales causas de muerte en todo el mundo, y afecta a millones de personas cada año. En España, según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística publicados en 2022, se produjeron más de 28.000 muertes por enfermedades isquémicas del corazón, que incluyen el infarto de miocardio.Además, cada año se producen alrededor de 120.000 casos de infarto de miocardio en nuestro país, según la Sociedad Española de Cardiología.
Esta afección se produce cuando el flujo sanguíneo hacia el corazón se ve interrumpido, lo que puede provocar daños irreparables en el músculo cardíaco y poner en peligro la vida del paciente. Actualmente, existen tratamientos eficaces para tratar esta afección, además de grandes avances en la prevención en la cual es más recomendable invertir, ya que es mejor trabajar en la prevención que paliar los daños que se pudieron haber evitado.
¿Qué es el infarto de miocardio?
El infarto de miocardio, o también conocido como ataque cardíaco, es una afección en la que se produce un daño en el músculo cardíaco debido a la falta de riego sanguíneo a una parte del corazón. Este cuadro médico se produce cuando una arteria coronaria, que es la encargada de suministrar sangre al corazón, se bloquea por un coágulo sanguíneo o por una acumulación de grasa y otras sustancias en sus paredes (lo que se conoce como aterosclerosis).
Ante esta circunstancia, la parte del corazón que recibía todo ese riego sanguíneo procedente de esa arteria se queda sin su suministro de oxígeno y nutrientes lo que puede provocar un importante daño celular en cuestión de minutos.
Los síntomas de esta afección médica pueden ser muy dispares y varían desde el más conocido entre todos, que se trata de un dolor agudo y opresor en el pecho que dificulta la respiración y que puede expandirse hacia los brazos, la espalda, el cuello o la mandíbula entre otros, como la percepción de un dolor en la boca del estómago, que compone otro de los dolores más representativos de esta enfermedad. En algunos casos, todos estos síntomas se perciben de una forma muy débil, por lo que pueden pasar desapercibidos para nosotros, o incluso no presentarse, ante esta realidad lo que se está produciendo es lo que se conoce como un infarto de miocardio silencioso.
Sobre estos síntomas nos habló más en profundidad el Doctor Óscar Díaz, cardiólogo en nuestra clínica RC Celta, en la entrevista que nos facilitó el pasado mes de diciembre.
Factores de riesgo en un infarto de miocardio
Cuando hablamos de los factores de riesgo de un infarto de miocardio debemos clasificarlos en dos grandes grupos, aquellos factores que podemos modificar y los que no.
Los factores de riesgo que componen los no modificables son los intrínseco, componen la edad, el sexo o el historial familiar. Ante este tipo de factores la mejor forma de “prevenir” los posibles problemas médicos que se puedan dar es a través de la prevención y las revisiones médicas.
Por otro lado se encuentran los modificables, este tipo de factores son sobre los que podemos actuar de forma directa y nos pueden ayudar a prevenir este tipo de enfermedades. Entre ellos se encuentran:
- El tabaco: Fumar compone uno de los principales factores de riesgo para la salud coronaria. Los componentes químicos que conforman el tabaco son muy nocivos para nuestras arterias, propiciando la formación de coágulos.
- Hipertensión arterial: Los altos niveles de tensión arterial provoca que nuestro corazón bombee la sangre con más fuerza, generando el estrechamiento y endurecimiento de nuestras arterias. Esta condición puede provocar que con el tiempo se formen placas en nuestras arterias, aumentando así el riesgo de sufrir un infarto de miocardio.
- Altos niveles de colesterol: Los elevados niveles de colesterol en sangre provoca que se depositen en nuestras arterias depósitos de grasa, creando lo que se conoce como placas. Estas placas son las que pueden provocar que se estrechen las arterias reduciendo así el flujo sanguíneo aumentando el riesgo de que se produzca un infarto. Además, se pueden dar otras posibilidades, como que estas placas se desprendan de las paredes de las arterias generando un coágulo y obstruyendo el flujo sanguíneo imposibilitando que la sangre fluya libremente.
- El sedentarismo compone uno de los principales problemas del siglo XXI. Cuando no nos movemos nuestro cuerpo disminuye la capacidad de producir energía y de consumir el oxígeno necesario. Además, también puede ser un aliciente para que se generen otras condiciones de riesgo para nuestra salud coronaria.
- La obesidad: Esta condición puede aumentar el riesgo de sufrir un infarto de miocardio, contribuyendo a que se desarrollen otros problemas médicos que tienen efectos directos en la circulación de nuestra sangre. Además, el exceso de peso en nuestro cuerpo obliga a nuestro corazón a bombear un mayor cantidad de sangre provocando el estrés de las arterias y aumentando el riesgo a sufrir una obstrucción.
- La Diabetes que consiste en una alteración del metabolismo de la glucosa y que va muy ligado al sobrepeso y la obesidad aumenta el riesgo de obstrucción arterial tanto coronaria como en otras localizaciones vasculares.
Hoy en día disponemos de tratamientos eficaces para lograr un buen control metabólico reduciendo el daño vascular en el paciente diabético y por tanto, reducir el riesgo de infarto y la mortalidad.
El infarto de miocardio es una afección seria
Un ataque cardíaco se produce por obstruccion coronaria y representa un grave problema de salud con riesgo de producir la muerte asi como graves consecuencias para la calidad de vida de los pacientes que logran sobrevivir. Para evitarlo, es importante invertir en la prevención, modificando hábitos perjudiciales como el sobrepeso, la falta de actividad física, lo el tabaquismo, entre otros. Además es imprescindible conseguir un buen control de otros factores de riesgo como la diabetes, la Hipertensión arterial y los niveles elevados de colesterol en la sangre.
La realización de revisiones médicas periódicas permite evaluar la salud de nuestro corazón, controla los factores de riesgo mencionados y así prevenir problemas cardiovasculares.
En la Clínica RC Celta contamos con los mejores especialistas en cardiología, dispuestos a asesorarte y ayudarte a cuidar de tu salud cardiovascular y la de tus seres queridos.